miércoles, 29 de abril de 2009

Segundo Artículo: "INFLUENCIA DE LA FAMILIA SOBRE EL DESARROLLO DE LOS ESCOLARES"




INTRODUCCIÓN:
A pesar de que la escolarización obligatoria supone una ampliación considerable de los contextos de socialización externos al hogar, cobrando una importancia creciente, la familia continúa ejerciendo una influencia notable sobre el niño.
Tanto la escuela como la familia son portadoras de la función que les es asignada y esta es el determinante principal de cuáles características psicológicas se acentúan y cuales se transforman.
Se parte en todo momento de considerar, por eso, a la familia como una institución social desde su carácter como sostén biológico, afectivo, económico del sujeto y a la vez por su dinámica interna, como un grupo a través del cual el sujeto adquiere las cualidades primarias de subjetividad que lo distinguen como ser social, portador en sí mismo de las características principales que lo distinguen como perteneciente a un determinado régimen social.

DESARROLLO:
En la edad escolar, los patrones generales de influencia de las prácticas educativas de los padres sobre la autoestima, dependencia, motivación de logro del niño, etc., continúan siendo válidos (con referencia a la edad preescolar).
Encontramos continuidad, por ejemplo, en el hecho de que los niños educados en ambientes democráticos siguen manteniendo las características positivas detectadas en los años preescolares; si además los padres han mantenido exigencias de conducta madura y una consistente exigencia de cumplimiento de reglas, la capacidad de los niños para tomar iniciativas, asumir el control de situaciones y esforzarse en las actividades cotidianas, es aún mayor.
Si en la familia, durante la etapa preescolar el niño ha resuelto la problemática de conquistar un lugar propio, no interfiriendo las relaciones entre sus padres u otros miembros adultos de su grupo familiar , lo que le conduce a no tener una relación de competencia (en la que compite con uno de ellos en tanto gana el favor del otro) ; es decir, supera con ayuda de los padres, una relación lineal con estos; por una relación triangular, llega a la escuela con todos los poros abiertos para aprender todo lo nuevo que le espera. La competencia legítima es con sus iguales para ganar un lugar entre ellos y situarse de un modo auténtico en el grupo escolar; así puede lograr mejores habilidades sociales que lo sitúan en el lugar de los niños que tienen éxito en la escuela.
Generalmente los padres que puedan lograr esta triangulación son los que facilitan el tránsito hacia el nuevo espacio escolar.
En otros terrenos, como es el de la influencia en el comportamiento agresivo, sí se da un cambio evolutivo. El control estricto sin explicación de las normas se asociaba durante los años preescolares con niño dóciles, no agresivos; este patrón continúa siendo así solo si se ve acompañado de niveles razonables de afecto, ya que, si esto no sucede, es decir, si junto a un comportamiento autoritario se da falta de afecto, comienzan a aparecer comportamientos antisociales; en concreto, el castigo, especialmente el castigo físico, encuentra una conexión particularmente acusada con la agresividad del niño, en cuanto que estos pueden ver en sus padres agresivos un modelo de comportamiento por imitar, siendo a veces frecuente que se manifiesten como dóciles en el contexto de la familia, pero agresivos en otros ambientes (en la escuela, con los iguales).
También resultan especialmente relevantes sobre el desarrollo de la agresividad aquellos patrones de comportamiento paterno que se caracterizan por ser en ocasiones permisivos y en otras punitivos ante un mismo comportamiento del niño. Es probable que los altos niveles de permisividad propicien en el niño la creencia de que la expresión de tendencias agresivas es completamente aceptable.
La influencia de los padres en esta etapa se deja notar también de forma marcada en la socialización de los roles sexuales. En la familia convencional, las madres tienden a manifestarse como sumisas, emotivas, sensibles a las situaciones interpersonales, afectuosas y aceptadoras; en contraste, los padres suelen aparecer como más dominantes, independientes, asertivos y competentes a la hora de hacer frente a los problemas. Es así como en el interior de la familia se reproduce la tipificación sexual que caracteriza a nuestra sociedad, de forma que los niños tenderán a imitar estos patrones, sobre todo cuando estos modelos resultan atractivos y son afectuosos.
La tipificación sexual no solo se produce a través de la imitación de los modelos, sino también mediante prácticas educativas diferenciadoras, de forma que a los niños se les anima a que sean independientes, competitivos y controlen sus sentimientos (“los niños no lloran”), mientras que a las niñas se les enseña a ser afectuosas, hábiles en las actividades interpersonales, emocionalmente expresivas y dependientes. Los juguetes y las ropas que se les compran, la decoración de sus habitaciones, etc., son ejemplos adicionales de este proceso de tipificación a que acabamos de hacer referencia.
De todos modos en el actual contexto histórico-social, por influencia de los medios de comunicación, las prácticas educativas en las familias tienden a ser más homogéneas. Es un modo de ser de la sociedad, influyendo desde la familia para que desde esta garantice la perpetuación del régimen establecido. Solo, que la familia desde su dinámica, puesto que es además de institución social, un grupo básico; puede alcanzar otro modo de ser de sus interacciones y preparar desde ella al sujeto ideológico para la transformación y el cambio. Para ello ha de ser preparada.

Determinantes de las prácticas educativas de lo padres:
Las prácticas educativas que los padres desarrollan con sus hijos están determinadas por una serie de factores (ya hemos hecho referencia a algunos de ellos) que podemos dividir en tres grupos:
1) Factores relacionados con el niño: edad, sexo, orden de nacimiento (los padres tienden a ser mas inseguros con el primogénito; son más directivos, utilizan estrategias verbales más elaboradas con ellos), características de personalidad.
2) Factores relativos a los padres: sexo, experiencia previa como hijos y como padres, características de personalidad, nivel educativo (son los padres con más años de escolarización los que se sienten más protagonistas del desarrollo de sus hijos y sostienen expectativas de logro más altas). Dentro de estos, pero de naturaleza más mediadora y cognitiva, son aquellos que tienen que ver con las ideas que sostienen acerca del proceso evolutivo y la educación, y las expectativas de logro que tienen puestas en sus hijos.
3) Factores relacionados con la situación en la que se lleva a cabo la interacción: características físicas de la vivienda, contexto histórico, etc.

Conexiones de la familia con otros contextos socializadores:
Como se comentaba al inicio, los años escolares se caracterizan por la importancia creciente que cobran los contextos socializadores externos a la familia, sobre todo la escuela y el grupo de iguales; los mismos son contextos interconectados. Aún existiendo en cada uno de ellos características que les son propias y que hacen que la familia, las escuela y los iguales sean contextos diferentes, la experiencia en uno de ellos puede servir como facilitador u obstáculo para la adaptación en los otros.

Familia-iguales:
Entre estos contextos existen puntos de conexión que facilitan el tránsito de uno a otro. En este sentido, los niños que han sido educados en ambientes familiares en los que existían normas claras y consistentes, altos niveles de comunicación entre los distintos miembros de la familia, y con padres cariñosos, receptivos hacia los puntos de vista y las opiniones del niño y potenciadores de independencia, son los que manifiestan mejores habilidades sociales en el grupo de iguales.
La familia influye de modo indirecto en muchas ocasiones, sobre las relaciones del niño con sus compañeros: a través del lugar que elige para vivir, sus reacciones ante el comportamiento social del niño, los valores que sostiene en torno al grado de importancia que tienen para el niño estas relaciones, el grado en que cree que debe controlar la vida de los hijos o su concepción sobre cómo cree que deberían estar estructuradas estas amistades, el modelo que los padres aportan cuando interactúan con sus propios amigos, etc. (Rubin y Sloman, 1984).

Familia-escuela:
Existen discontinuidades intrínsecas por las que todos los niños deben pasar (todos los niños al entrar al sistema escolar notarán que las relaciones que se establecen, las estrategias y los recursos comunicativos, los contenidos, la organización, las exigencias, etc., son diferentes a las que conocían por su experiencia en el medio familiar). Sin embargo, para algunos, la experiencia y los aprendizajes realizados dentro de la familia facilitarán la transición, mientras que para otros niños la discontinuidad entre la familia y la escuela será mayor, convirtiéndose a veces en un abismo insalvable que condicionará negativamente su adaptación y éxito en el medio escolar.
Si analizamos las características familiares de los niños que obtienen éxito en la escuela, encontraremos, con bastante probabilidad, algunos puntos en común (Scott-Jones, 1984; Hess y Holloway, 1984). En primer lugar, podemos establecer las diferencias entre unos hogares y otros en función del uso que hacen del lenguaje, los estilos de enseñanza y las prácticas educativas generales. Un segundo aspecto importante en el entorno familiar (que se tratará más adelante) tiene que ver con las expectativas y atribuciones acerca del logro del niño en la escuela. Por último, un tercer aspecto importante tiene que ver con características más materiales del entorno familiar: existencia en el hogar de libros de consulta u otros materiales de lectura, juegos que potencian habilidades cognitivas, espacios propios donde el niño pueda llevar a cabo estas u otras actividades, etc.



Análisis

El presente artículo, tiene por finalidad dar a conocer la importancia de la influencia decisiva que tiene la familia sobre el desarrollo psicológico de los niños en edad escolar, lo que se aprecia en diferentes dimensiones evolutivas (agresividad, logro escolar, motivación de logro, socialización de los valores sexuales, etc.). En general, son los estilos educativos y democráticos, por su juiciosa combinación de control, afecto, comunicación y exigencias de madurez, los que propician un mejor desarrollo en el niño.



Citas

"Si además los padres han mantenido exigencias de conducta madura y una consistente exigencia de cumplimiento de reglas, la capacidad de los niños para tomar iniciativas, asumir el control de situaciones y esforzarse en las actividades cotidianas, es aún mayor."
Cibeles Lorenzo Viego. Psicóloga

"La familia influye de modo indirecto en muchas ocasiones, sobre las relaciones del niño con sus compañeros."
Cibeles Lorenzo Viego. Psicóloga

"El amor promueve la acción educativa familiar, es el motor. El amor no es un dejar hacer. A veces, es también decir no. Los niños no saben distinguir lo que está bien de lo que está mal, lo que es peligroso de lo que no es, y es necesario hacérselo ver, pero dando lugar al razonamiento, al diálogo, a la comunicación." www.romsur.com

"Los padres pueden ofrecer elementos que estimulen al niño, pero no que supongan un fin en sí mismos. Los castigos y amenazas no tienen efectos positivos sobre la motivación, pero sí la manifestación del reconocimiento de los padres por una tarea bien hecha." www.romsur.com

Crítica

En el artículo que he dado a conocer, queda de gran manifiesto que la influencia de la familia sobre el desarrollo de los escolares es el pilar fundamental de sus hijos (escolares) antes de ingresar al sistema educativo (colegio).
Si bien los padres, son el ejemplo a seguir de sus hijos, deben influenciar en ellos formas de sociabilización, mediante prácticas educativas de forma que sus hijos puedan ser personas independientes, competitivas y sepan controlar sus sentimientos.
Los padres no deben demostrar actitudes agresivas, porque los niños adoptan este comportamiento en otros lugares, que por lo general es en el colegio con sus compañeros. Los padres deben comprender que la experiencia y los buenos aprendizajes realizados por ellos hacia sus hijos, los ayudará en gran medida en la transición del hogar al colegio.




Conclusión

La influencia de la familia sobre los niños durante los años escolares se deja notar en diferentes dimensiones evolutivas (agresividad, logro escolar, motivación de logro, socialización de los valores sexuales, etc.) de forma similar a como sucedía en años preescolares. En general, son los estilos educativos y democráticos, por su juiciosa combinación de control, afecto, comunicación y exigencias de madurez, los que propician un mejor desarrollo en el niño.
Los años escolares se caracterizan por la importancia creciente que cobran los contextos socializadores externos a la familia, sobre todo la escuela y el grupo de iguales; los mismos son contextos interconectados. Aún existiendo en cada uno de ellos características que les son propias y que hacen que la familia, las escuela y los iguales sean contextos diferentes, la experiencia en uno de ellos puede servir como facilitador u obstáculo para la adaptación en los otros.

Significado de la escala:

1

Totalmente en desacuerdo

No presento en ningún grado desarrolladas las característica planteadas en el enunciado.

2

En desacuerdo

Hay algunos elementos desarrollados (muy pocos) de los solicitados en el enunciado.

3

Ni de acuerdo ni en desacuerdo

Solo a veces presento los elementos que se piden en el enunciado.

4

De acuerdo

Ejecuto frecuentemente, en su análisis, lo solicitado en el enunciado.

5

Totalmente de acuerdo

Realizo todo lo planteado en el enunciado.


RUBRICAS/PUNTOS

1

2

3

4

5

1

Presento un texto que trata los temas desde una perspectiva educativa y es de mucho interés. (esto por que todos mis compañeros y compañeras están invitados a leer mis textos y comentarios)






5

2

Presento un texto que tiene una extensión mínima de al menos el equivalente en Word a 3 hojas de oficio. (el máximo no está regulado)






5

3

La presentación la he realizado de tal manera que sea de fácil lectura (respecto al color, tamaño y diseño de la letra) y se puede distinguir con claridad, en la presentación, el texto de mi análisis.






5

4

Le he incorporado al texto algunos gráficos o dibujos o fotografías alusivas al tema tratado, pues considero que esto invita a una lectura más amena y denota más interés por parte del o la autora del blog (y he incorporado mi propia fotografía)






5

5

Inicio mi análisis planteando como yo entiendo lo desarrollado por el autor (parafraseo)






5

6

Durante el análisis planteo con claridad mis planteamientos, críticas, puntos concordantes o discordantes con el autor/a.






5

7

Durante el análisis utilizo frecuentemente el recurso “citas de otros autores” para reforzar lo que he planteado yo, o algún punto que considero importante tratado por el autor del texto.






5

8

Las citas que utilizo son de diversas fuentes, tales como, otros autores buscados por mi, autores o ideas tratadas en clases, citas de presentaciones o disertaciones de mis compañeros, citas de artículos anteriores, etc.






5

9

Realizo en mi análisis aplicaciones o referencias a nuestra realidad educativa si es un texto extranjero, o a realidades educativas que yo he vivenciado para explicar con un sentido contextual el texto presentado.






5

10

En el último punto del análisis presento una síntesis de lo que he querido expresar, a modo de conclusión.






5

Suma parcial de puntos de cada columna:






50

Mi suma total de puntos, según la suma parcial anterior, es de 50 puntos.

La nota de mi autoevaluación es: 70

La nota se obtiene multiplicando el puntaje total por 0.14

(Ej.: 50 ptos. Por 0.14 = 7.0)













miércoles, 15 de abril de 2009

Primer Artículo: Desmotivación escolar ¿Por qué no quieren ir al colegio?

Es normal que, entre los 10 y 12 años, a veces los niños no quieran ir al colegio. Generalmente es para evitar una consecuencia negativa como, por ejemplo, entregar un trabajo sin terminar, o rendir una prueba para la cual no estudiaron.Según sostiene Mónica Rademacher, psicóloga infantil, “además, a esta edad comienzan las famosas ‘cimarras’ en algún ramo o un día de clases, las cuales son realizadas generalmente en grupos. El objetivo del escolar en estos casos es probar fuerzas, hacer ostento de su creciente autonomía personal, junto con rebelarse con todo aquello que simbolice figuras de autoridad, y el colegio y sus profesores obviamente son parte de ellas”.


Estar Alerta
Según la psicóloga, el hecho que un escolar de esta edad u otra no quiera ir a clases, es una situación que siempre merece atención. “El no querer ir a clases repetidas veces, es una señal clara de que algo no anda bien en el niño. Los padres deben preocuparse y estar alerta cuando se dan cuenta de que hay un aumento en la frecuencia o intensidad del evitar asistir a clases. Es decir, si observan que constantemente está dando excusas, miente o se queja frecuentemente de dolores de estómago, cabeza y otros para no ir al colegio o para ser retirado antes de la hora de salida”.Mónica Rademacher sostiene que el no querer ir a clases siempre va de la mano de alguna buena razón por parte del niño, la que puede ser explícita o no. En este segundo caso, “es tarea de los padres y especialistas el descubrir la causa de su desmotivación”.
Paula Pastor, psicopedagoga miembro del equipo de profesionales de PadresOk, sostiene que en algunos casos la falta de interés por el colegio se relaciona con dificultades de aprendizaje que no han recibido tratamiento oportuno, y que se han acarreado durante años. Eso los lleva a presentar serias dificultades de lectura, estructuración gramatical, y comprensión lectora, por lo que se pueden generar problemas de redacción, entre otros. “Muchas veces estas dificultades, en 5° ó 6° básico, se hacen tan presentes que inciden bastante en su rendimiento escolar, el cual va bajando, y gatillan en el niño una menor motivación para estudiar o aprender. Como consecuencia, tiene malas notas y finalmente no quiere ir a clases en forma persistente”.Paula Pastor afirma que en estos casos aún es tiempo para revertir la situación. “Con un Tratamiento Psicopedagógico adecuado lo más probable es que se pueda apoyar al niño y ayudarlo a salir adelante, aún cuando en ocasiones, se hace necesario el trabajo en equipo con un psicólogo infantil , los padres y el profesor jefe”.



¿Por qué no quieren ir al colegio?

El factor común según la profesional, es la existencia de “un cambio” desfavorable a los ojos del escolar. “Estos pueden ser cambios de colegio de él o de sus mejores amigos, repitencias, separación conyugal de los padres, problemas familiares, dificultades con algún profesor o con alguno de sus pares, síndromes depresivos o ansiosos, entre otros”.Agrega que es importante recordar que cada niño es diferente y, por lo tanto, cómo enfrente estos cambios dependerá de cada cuál. Además, “los padres deben recordar que las razones de peso del niño serán muy distintas a las de los adultos”.El que algunos niños molesten a otros por tartamudear, por ser tímidos, gorditos, por cómo se visten o incluso por el auto “viejo”que tiene su papá pueden ser, según plantea la psicóloga, “situaciones tremendamente dolorosas para los niños, que por su intensidad o frecuencia pueden llevar, dependiendo del niño, a desmotivarlo a ir a clases como una manera de evitar aquello que lo perturba”.


Aprender a Escucharlos


Mónica Rademacher recomienda a los papás escuchar lo que sus hijos les tengan y quieran decir, no darles argumentos, ni interumpirlos mientras explican sus motivos. “Asimismo, deben acogerlos y mostrarles con gestos y palabras que los entienden y que les preocupa lo que les cuentan”. También es importante mostrarle al niño que frente a las dificultades hay dos tipos de soluciones, ‘las parche’ y las de fondo.Es aconsejable que le planteen las consecuencias a corto y largo plazo de su inasistencia a clases o solución ‘parche’. “Por ejemplo, pueden decirles que se atrasarán en materias, pruebas, incluso que pueden llegar a perder el año por inasistencias. Luego, deben mostrarle las ventajas de las soluciones de fondo y conversar con él para alentarlo a enfrentar la raíz del problema, señalarle con ejemplos concretos como él en su corta experiencia de niño ya ha sabido lidiar con dificultades y ser persistente llegando al éxito”.La psicóloga recomienda revisar con el niño las posibles soluciones a su problema y estimularlo a llevarlas a cabo. Sin embargo, si a pesar de estas conversaciones el menor no quiere ir al colegio, si las causas del problema persisten, o si presenta alteraciones del ánimo, apetito, sueño, aislamiento, recurrentes dolores abdominales, cefaleas, es recomendable consultar a un psicólogo infantil.


Fuente: Artículo publicado en Revista Padresok, Agosto 2003.


ANALISIS:


Es frecuente que los niños entre 10 y 12 años no quieran asistir al colegio, por lo general es para evitar no entregar un trabajo o no rendir una prueba, para la cual no estudiaron. De esta forma comienzan las llamadas “cimarras”.

Cuando se presenta esta reacción en el escolar se debe poner atención, ya que, algo ocurre, los padres deben preocuparse cuando los escolares con frecuencia evitan ir a clases por alguna excusa.

Por lo general, la falta de interés por ir a clases se relaciona con problemas de aprendizaje y como consecuencia tienen malas notas y no quieren asistir a clases. En muchos casos puede ayudar un tratamiento Psicopedagógico o consultar a un Psicólogo infantil.

Algunos problemas que pueden influir directamente con este problema son las repitencias, separación de los padres, depresión, entre otros. Otro factor puede relacionarse entre los mismos compañeros los cuales suelen molestan mucho a otros, por deficiencias físicas o sicológicas que éstos puedan tener, de tal modo, que los desmotivan al ir a clases.

Es aconsejable que los padres presten atención a sus hijos, los acojan y a su vez denoten preocupación por lo que les cuentan y sepan estimularlos a encontrar soluciones.


Citas:

"Es tarea de los padres y especialistas el descubrir la causa de su desmotivación"
http://www.padresok.com/

"Los padres deben recordar que las razones de peso del niño serán muy distintas a las de los adultos"
http://www.padresok.com/


"A si mismo los padres deben acogerlos y mostrarles con gestos y palabras que los entienden y que les preocupa lo que les cuentan"
http://www.padresok.com/


"Desmotivación no se debe a una simple "flojera", sino que representa una conducta de protección que asume el pequeño cuando se enfrenta a una situación que le resulta amenazante al interior del establecimiento"

"Lamentablemente, la problemática está relacionada con el concepto del éxito personal, en el marco de lo que culturalmente es definido como lo aceptable. Los pequeños se desenvuelven en una cultura que por lo general es poco tolerante a la diversidad y donde todavía existen valores estandarizados. Y, si un niño no es tan exitoso en lo socialmente aceptado, lo empieza a pasar mal y el colegio va adquiriendo un significado más bien aversivo y, por supuesto, se desmotiva"
http://www.alemana.cl/



Crítica:
A mi parecer, creo que la motivación por asistir a clases en los escolares debe ser influenciada por los padres, ya que, ellos son el pilar fundamental en la educación de sus hijos. Deben explicarles lo importante que es asistir a ellas, mencionándoles que aprenderán nuevos conocimientos e interactuarán con nuevos amigos. Además deben saber educarlos desde pequeños, inculcándoles el respeto hacia las demás personas, para evitar de esta forma que ellos puedan ser causantes de burlas que pudiesen conllevar a la desmotivación en sus compañeros de no ir a clases.

Si bien es cierto que un tratamiento Psicopedagógico o un Psicólogo infantil puede ser de gran ayuda, pienso que los padres deben ser el pilar fundamental y el constante apoyo para sus hijos mientras viven la etapa escolar y junto a ellos pedan solucionar dificultades o problemas que se les pueda presentar.

Conclusión:
Este trabajo me ha ayudado a comprender y mirar desde otro punto de vista, los diferntes enfoques acerca de los motivos por los cuales los niños se desmotivan al ir a clases. Muchos de nosotros también pasamos por esta etapa y ahora a través del desarrollo de este artículo puedo comprender . Además también sirve consejo para uno en el sentido de como tratar esta problemática con un hijo en su edad escolar.



Significado de la escala:

1

Totalmente en desacuerdo

No presento en ningún grado desarrolladas las característica planteadas en el enunciado.

2

En desacuerdo

Hay algunos elementos desarrollados (muy pocos) de los solicitados en el enunciado.

3

Ni de acuerdo ni en desacuerdo

Solo a veces presento los elementos que se piden en el enunciado.

4

De acuerdo

Ejecuto frecuentemente, en su análisis, lo solicitado en el enunciado.

5

Totalmente de acuerdo

Realizo todo lo planteado en el enunciado.


RUBRICAS/PUNTOS

1

2

3

4

5

1

Presento un texto que trata los temas desde una perspectiva educativa y es de mucho interés. (esto por que todos mis compañeros y compañeras están invitados a leer mis textos y comentarios)






5

2

Presento un texto que tiene una extensión mínima de al menos el equivalente en Word a 3 hojas de oficio. (el máximo no está regulado)






5

3

La presentación la he realizado de tal manera que sea de fácil lectura (respecto al color, tamaño y diseño de la letra) y se puede distinguir con claridad, en la presentación, el texto de mi análisis.






5

4

Le he incorporado al texto algunos gráficos o dibujos o fotografías alusivas al tema tratado, pues considero que esto invita a una lectura más amena y denota más interés por parte del o la autora del blog (y he incorporado mi propia fotografía)






5

5

Inicio mi análisis planteando como yo entiendo lo desarrollado por el autor (parafraseo)






5

6

Durante el análisis planteo con claridad mis planteamientos, críticas, puntos concordantes o discordantes con el autor/a.






5

7

Durante el análisis utilizo frecuentemente el recurso “citas de otros autores” para reforzar lo que he planteado yo, o algún punto que considero importante tratado por el autor del texto.






5

8

Las citas que utilizo son de diversas fuentes, tales como, otros autores buscados por mi, autores o ideas tratadas en clases, citas de presentaciones o disertaciones de mis compañeros, citas de artículos anteriores, etc.






5

9

Realizo en mi análisis aplicaciones o referencias a nuestra realidad educativa si es un texto extranjero, o a realidades educativas que yo he vivenciado para explicar con un sentido contextual el texto presentado.




3



10

En el último punto del análisis presento una síntesis de lo que he querido expresar, a modo de conclusión.






5

Suma parcial de puntos de cada columna:






48

Mi suma total de puntos, según la suma parcial anterior, es de 48 puntos.

La nota de mi autoevaluación es: 67

La nota se obtiene multiplicando el puntaje total por 0.14

(Ej.: 50 ptos. Por 0.14 = 7.0)